Días atrás recibí el calendario de competencias enviado por la Federación Nacional a todas las Asociaciones Regionales de nuestro país y, no puedo dejar de pasar la oportunidad de plantear algunos temas que, para el Directorio que asumirá en enero próximo, debería ser motivo de análisis y reflexión.
Elaborar un calendario de competencias atléticas en nuestro país ha sido siempre un tema de alta complejidad, toda vez que es el hemisferio norte, comandado por los países europeos y norteamericanos los que imponen sus criterios para programar los principales torneos internacionales, llámense estos Juegos Olímpicos, Campeonatos Mundiales de categorías, Meetings y otros, lo que nos obliga, en ciertos aspectos, a ajustar la programación de algunas competencias nacionales.
A nuestro país, como miembro de la World Athletics (WA), para dar la opción a los atletas nacionales de alto rendimiento, que son por lo general muy pocos, le cabe la responsabilidad y compromiso de hacerse presente y participar con sus mejores representantes en estos eventos internacionales, pero es aquí donde surgen varias interrogantes:
¿Es necesario calendarizar las competencias nacionales en función los atletas nacionales de más alto nivel?
¿En qué meses del año deberían programarse las principales competencias nacionales?
¿Por cuántos meses debería extenderse el calendario nacional de competencias atléticas?
Si consideramos que la gran mayoría de los atletas nacionales, tanto de la categoría Seniors (Adultos o Todo Competidor), como Juveniles (Sub 20) y Menores (Sub 18), son en su gran mayoría estudiantes de enseñanza superior y/o escolares de enseñanza media, el calendario atlético nacional debería considerar desde fines de noviembre y todo el mes de diciembre como un período de receso competitivo, por lo tanto, si se tiene en cuenta que previa a la participación en torneos el atleta debería cumplir un ciclo de preparación no inferior a un par de mesociclos (6, 8 o más semanas de entrenamiento).
Así las competencias deberían programarse a partir prácticamente de marzo en adelante, excepto en algunos casos de especialidades específicas como Marcha Atlética, Maratón, carreras de Cross Country u otras. Surge inmediatamente otra interrogante:
¿Cuál es el principal propósito que debe cumplir el Campeonato Nacional de Chile en la programación atlética anual?
Por las características geográficas de nuestro país, cerca de 4.200 km. de longitud, con muy variadas condiciones climáticas, y dando el realce que corresponde al “Campeonato Nacional” como la instancia evaluativa del desarrollo alcanzado por el atletismo a nivel país en el año calendario. Además se debe presente que, a esta instancia final deberían poder concurrir representaciones de todas las regiones del país con un muy buen grado de preparación. Los Campeonatos Nacionales de la máxima categoría y categorías juveniles y menores deberían tener lugar hacia término del mes de octubre o a más tardar en la primera quincena de noviembre del año calendario.
Programar los campeonatos nacionales de las tres categorías antes mencionadas en una misma fecha, como alguna vez lo hizo la Federación Atlética, permitiría realizar una real evaluación del nivel de desarrollo alcanzado por el atletismo nacional en cada una de ellas, y no distorsionar esta instancia evaluativa con la participación de atletas de categorías inferiores que, por su nivel técnico, compitan en más de una categoría, por ejemplo, menores en la de juveniles y estos últimos y algunos menores en la categoría máxima.
¿Y cómo seleccionar entonces a atletas postulantes a competencia internacionales programadas en meses de comienzo de año? En esto debemos ser objetivos.
¿Cuántos atletas nacionales tienen un nivel técnico con real opción de competir en torneos internacionales?
No son muchos. Entonces lo más indicado sería realizar campeonatos reducidos y específicos programando las pruebas que ameriten ser realizadas, convocando a los atletas previamente preseleccionados más algunos de nivel que los acompañen en dicha instancia evaluativa de su actual nivel técnico.
Lo expuesto, son solo algunos de los aspectos que ameritan ser materia de estudio en favor de definir criterios para elaborar un calendario atlético coherente con la misión declarada de la Federación Nacional a fin de incrementar el desarrollo atlético de nuestro país.
Sergio Guarda Etcheverry
Entrenador de Atletismo